junio 14, 2012

El veterano



     En un ocioso país escandinavo se organizó el Primer Concurso Internacional del Hombre con el Pene Más Largo; el criterio para elegir al ganador sería elegir al hombre "que tuviera más distancia entre al límite del escroto y la punta del glande". Se llena el Estadio Olímpico Lasse Viren y entra el primer concursante:
     —A ver, señor, pase usted, bájese los pantalones y vamos a ver cuánto mide del límite del escroto a la punta del glande: ¡8 centímetros! ¡Impresionante! ¡Qué bárbaro!
     Va el segundo participante:
     —A ver, usted, señor veamos cuanto tiene... ¡12 centímetros! ¡Asombroso! ¡Inimaginable!
     Se acerca un tercer concursante:
     —Veamos, señor, pase por acá. ¿Usted cuánto tiene? ¡10 centímetros! Lo sentimos, está usted descalificado.
     Y en eso llega un viejito:
     —A ver, señor, ¿usted cuánto tiene entre el límite del escroto y la punta del glande?
     Y antes de que lo midan, el concursante responde:
     —Pues mire, entre mi escroto y la punta de mi glande hay 273,419 kilómetros.
     —Pero, ¿qué dice usted?
     —Como lo oye: que entre mi escroto y la punta de mi glande hay 273,419 kilómetros.
     —Señor, no nos venga usted aquí a tomar el pelo, si eso es imposible.
     —¿Imposible? ¡Si hasta lo tengo certificado!
     —¿Certificado?
     —Así es, señor. Lo tengo certificado.
     —Pero, a ver, ¿qué es lo que tiene usted certificado?
     —Pues tengo certificado que mi verga está aquí conmigo y que mis huevos se quedaron en Vietnam.